El otro día tuve una revelación, un flash en mi mente. Eran cerca de las 2 de la mañana y estaba enganchado viendo la tertulia política de La Noche en 24 Horas.
- Ojalá fuera tertuliano, o columnista en un periódico-. Pensé. Pensé que es algo que sabría hacer, que me gustaría hacer y por lo que me pagarían. Pensé también que de un tiempo a esta parte he perdido esa ilusión por todo que se tiene cuando es niño y siento que ando divagando, que no sigo mi propio camino. Pensé en que llevo toda la vida estudiando y me da la sensación de que no se hacer nada y que quizá debería haber escogido otra carrera con la que disfrutase más, como periodismo, historia o filología. Pero sólo ahora lo veo y parece tarde.
Me he dado cuenta que no quiero renunciar a eso, me acordé de las sabias palabras de Steve Jobs: No os conforméis, luchad siempre por vuestro sueño, y si aún no lo habéis encontrado seguid buscándolo. No quiero olvidarme de lo que soy y de lo que me gusta, y de tener claros mis objetivos finales en la vida y luchar por ellos. Esa es la actitud que separa la élite de la mediocridad.
Soy consciente de que se me dan bien hacer un número muy limitado de cosas, y modestamente creo que una es escribir. En verdad lo tuve siempre delante y nunca arrancaba por pereza. Eso se ha terminado.
Tengo que dar el máximo de mi mismo, disfrutar y auto realizarme en las cosas que hago y quién sabe si poder dedicarme profesionalmente a ello. No quiero acabar como el Héroe de Leyenda del que hablan los Héroes, o del que creo que hablan. Mi interpretación de la letra es la de una persona que ha olvidado sus sueños, lo que él quiere lograr (su héroe de leyenda) y que se ha conformado, ha pasado el tiempo y vive en la mediocridad, sin ilusión.
Y es por ello que quiero dedicarme a lo que me satisface sin que me importen las consecuencias. Quiero convertirme en aquello en lo que sueño convertirme. Y esto es algo que recomiendo a todo el que me esté leyendo en este momento: No renunciad a vuestros sueños, por difíciles que parezcan. No olvidemos nunca a Nuestro Héroe de Leyenda.
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